
En Clínica Pasteur te contamos de qué se trata el estrabismo en niños, una afección ocular que suele ser común en los menores, y cuál es su mejor tratamiento.
Existen condiciones oculares que se detectan en niños y que requieren de la mirada profesional para evaluar un posible tratamiento. Una de ellas es el Estrabismo.
Se trata de una afección que es preciso diagnosticar de forma oportuna, para evitar complicaciones que afecten el desarrollo visual en los más pequeños.
En Clínica Pasteur te contamos todo lo que necesitas saber sobre el estrabismo en niños, cómo identificarlo, qué tipos existen y cuáles son las opciones de tratamiento.
El estrabismo, también conocido como ojos cruzados, es una afección ocular que se presenta comúnmente en niños y se produce cuando los ojos no se encuentran alineados.
Cuando los ojos están desalineados existe el riesgo de desarrollar una complicación llamada ambliopía (ojo vago), que produce que la visión del ojo desalineado sea más débil.
En los niños, el estrabismo provoca que el cerebro ignore las imágenes del ojo desalineado, afectando la percepción de profundidad (es decir, la diferenciación entre la lejanía o la cercanía de lo que se observa).
El estrabismo infantil se puede advertir a través de distintos síntomas o señales de alerta, a continuación te las comentamos:
Entre los síntomas del estrabismo en bebés se encuentran: la desalineación de los ojos, los movimientos oculares anormales y la percepción de la luz de manera desigual en cada ojo. En bebés mayores de 3 meses, un síntoma común es la dificultad para enfocar objetos.
Cabe señalar que a partir de los 4 meses, los pequeños deben tener los ojos alineados la mayoría del tiempo. De no ser así es precisa la consulta al oftalmólogo infantil para un diagnóstico y tratamiento oportuno, a fin de evitar complicaciones como la ambliopía.
La consulta al especialista también es importante para descartar la afección, dado que algunos niños menores de un año pueden padecer pseudoestrabismo (ojos desalineados sin estrabismo que se corrige con la edad).
Si se advierte que los ojos del niño apuntan en diferentes direcciones al mismo tiempo o que cierra el ojo e inclina la cabeza al observar algo, o que le cuesta calcular distancias, puede tratarse de estrabismo.
Otros indicios de la afección pueden ser que el niño tenga visión doble, o que entrecierre un ojo al exponerse a la luz solar intensa (mayor sensibilidad), o que le cueste enfocar o hacer las tareas, o que tenga cansancio ocular o picor en los ojos.
De presentar alguno de estos síntomas es importante visitar a un oftalmólogo infantil para una revisión completa y prevenir complicaciones como la ambliopía o problemas de visión definitivos.
Entre las principales causas y factores de riesgo del estrabismo en niños, se encuentran:
Existen varios tipos de estrabismo. Entre los más comunes están: endotropia infantil, endotropia acomodativa y exotropía intermitente. A continuación te los detallamos:
Endotropia infantil: es cuando uno o ambos ojos del bebé o del niño pequeño están desviados hacia adentro.
Endotropia acomodativa: es cuando el ojo del niño se desvía hacia la nariz al enfocar un objeto, más frecuentemente cercano. Se trata del tipo de estrabismo más común que se presenta en niños a partir de los 2 años.
Exotropía intermitente: es cuando un ojo del niño se desvía en dirección opuesta a la nariz a veces, más frecuentemente al ver de lejos. En este caso, el niño puede entrecerrar el ojo ante la luz solar intensa.
El diagnóstico del estrabismo se efectúa en la consulta con el profesional de salud en un examen ocular que incluye la consulta sobre el historial familiar y los síntomas.
Además, se realiza una evaluación de agudeza visual, amplitud de movimientos extraoculares y reactividad pupilar, a través de las pruebas de oclusión alterna, oclusión-desoclusión y reflejo corneal a la luz.
El especialista puede requerir, en paralelo, un exámen neurológico de los pares craneales, para brindar un diagnóstico específico e indicar un tratamiento.
Las opciones de tratamiento para la corrección del estrabismo dependen de la edad del paciente, su historial clínico y la alineación ocular del niño. Estas son:
Los niños de cualquier edad pueden necesitar de lentes para corregir a veces y ayudar siempre en el tratamiento de su estrabismo.
Además se suele tapar el ojo fuerte con un parche ocular para evitar que el niño use ese ojo alineado y en su lugar empiece a utilizar el desalineado para fortalecerlo.
Existen ejercicios oculares ortópticos que sirven para fortalecer los músculos del ojo, estimular el ojo débil, mejorar la visión binocular y facilitar el enfoque de ambos ojos hacia adentro.
Los ejercicios consisten en practicar la convergencia ocular, acercando y alejando objetos para que el niño pueda mantener el enfoque, también en movimientos de seguimiento de objetos.
Cabe señalar que los ejercicios deben estar adaptados a las necesidades de cada niño y a su edad, para su eficacia deben ser constantes y se usan para complementar otros tratamientos como el uso de anteojos.
La cirugía correctiva de estrabismo en niños solo se realiza en casos necesarios según recomendación y criterio del médico tratante de la afección.
Se trata de una cirugía ambulatoria, con anestesia general, que tiene como objetivo posicionar correctamente los músculos para que los ojos apunten en la misma dirección.
Después de 3 días, de no existir complicaciones, la mayoría de los niños regresan a su rutina habitual. Cabe destacar que los niños que se someten a esta cirugía pueden requerir el uso de anteojos de igual manera.
El estrabismo infantil se puede corregir, aunque es fundamental su diagnóstico temprano para evitar todo tipo de complicaciones secundarias.
Si el estrabismo no es diagnosticado y tratado a tiempo, puede provocar una consecuencia grave: la ambliopía, conocida como ojo vago.
Como la visión definitiva se alcanza a los 8 años, lo ideal es consultar al oftalmólogo pediátrico para tratar el estrabismo lo antes posible.
En Clínica Pasteur te brindamos información importante para cuidar la salud ocular de tu familia. Si tu hijo presenta algunos de los síntomas mencionados, no dudes en contactarnos. Reserva tu hora aquí: https://agenda.pasteur.cl/web/.