Panfotocoagulación Láser Argón
Objetivo
El propósito principal de la fotocoagulación con láser es detener la fuga de sangre y líquido en la retina, ralentizando así la progresión de enfermedades retinianas. Este tratamiento busca preservar la visión y evitar un deterioro más severo.
¿En qué consiste?
La fotocoagulación con láser es un procedimiento ambulatorio realizado con anestesia local, lo cual minimiza el malestar durante la intervención. El procedimiento implica la aplicación de un láser para cauterizar las áreas afectadas de la retina. Aunque generalmente no causa mayores molestias, pueden ser necesarias varias sesiones para alcanzar los resultados deseados. Este tratamiento tiene el efecto de sacrificar parte de la visión periférica para salvaguardar la visión central y general del paciente. Es fundamental que los pacientes sometidos a esta terapia mantengan un seguimiento periódico con su oftalmólogo, ya que pueden ser requeridas aplicaciones adicionales de láser o la realización de otros procedimientos complementarios.
Complicaciones
En casos de fotocoagulación con láser extensa, pueden surgir algunas complicaciones. La pérdida de la función retinal periférica es una de las consecuencias posibles, lo que puede resultar en una disminución de la visión nocturna, reducción del campo visual y borrosidad en la visión central. Es crucial monitorear y gestionar estos efectos secundarios a través de consultas regulares con el oftalmólogo para maximizar los beneficios del tratamiento y ajustar el manejo según sea necesario.